En el apartamento ambos sab iacute an que no se rendir iacute an hasta que los gritos de placer llenaran cada rinc oacute n dejando claro que su deseo de continuar era inquebrantable
La hijastra conoc iacute a el arte de la seducci oacute n y disfrutaba cada momento de juego y tentaci oacute n
La madrastra de Luis ten iacute a un cuerpo escultural y una mente retorcida que lo llevaba al l iacute mite del placer
La colegiala acarici oacute con picard iacute a el rostro de su amante dejando claro qui eacute n llevaba las riendas de aquella noche llena de pasi oacute n